miércoles, 29 de abril de 2009

El instinto
























Lo que somos late muy dentro nuestro. Fuerte y constante, tajante y eterno... habita donde yace el alma.
Inevitablemente somos sometidos a los designios y las necesidades de nuestro instinto. Quizás con mas razón de la que la mismísima razon puede darnos. Y aún asi, nuestra conciencia, nuestros vanos pseudo-conocimientos, nos inducen a renegar aquella vieja Ley Natural. Nos pasamos las horas acallando esas voces, mas sabias que ninguna voz mortal.
Y entonces... esto es lo que queda de nosotros. Un sin fin de penurias inexplicables, una represion aguda de sentimientos que reclaman su libertad... que pujan por su libertad, y que no dejaran de acecharnos lastimosamente hasta que nos detengamos. Pero no, ciertamente no son suficientes las señales provenientes de lo mas profundo de nuestra ecencia, aún asi... no las oímos, no las obedecemos, no las comprendemos.
No SOMOS.

2 comentarios:

Matías dijo...

A veces no somos y a veces somos. El problema es que hoy no somos mucho más de lo que somos. La verdad, elusiva y cambiante a cada instante, contiene la posibilidad de dejarnos ser; fuiste al momento de escribir lo que escribiste; y podremos ser cada vez más si los instantes en que nos toca la verdad dejan de ser tales, y éstos se convierten en segundos, los últimos a su vez en minutos, luego en horas, días e incluso años.
Me gustó tu blog y gracias por el comment en el mío. En Zeitgeist estoy hace poquito, pero ya me uní a un proyecto para hacer un doc.
¿MSN?
Un saludo, Matías.

INNOCENCE & NON SENSE dijo...

puedo compadecer tus palabras al estar estas tan sufridas, tan indefensas, con las voces reprimidas, pero lentamente en lo que avanza el texto se tornan valientes y rugen en estruendo vital y violento!
puedo notar la desidia el hastio; esta es una palabra que me describe mil intentos de ser y no poder; en la miradas de los homnbres, de los desposeidos, de los que no se dejan ser, de los que ni siquiera saben que son y nunca pueden decidirse a existir. lo naturalmente bello, lo perfectamento eterno, la voz de la tierra que pisamos de los vientos que lamemos con ferocidad vertiginosa guiandonos con alertas, con justos "tiempos", y la melodia del fuego sigue estando susurrandonos frente a una vela que cuidamos en una noche sin luz para que no se extinga, y late como la misma vida, y queda ya entre pocos...

me llena de regocijo sentirme leida, por un ser tan obscuro y brillante, capaz de crear tanta profundidad en perfecta sincronia sentimental y gramatical, una vez mas un gusto haberla conocido señorita Satiata y un placer encontrar en el mundo voces tan profundas desprendiendo sus letras del papel hasta el eter, transformandolo en sensaciones y percepciones compartidas...

Benditas sean sus percepciones en este maldito mundo

Maru. =)